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Pumping Glowing Heart

Diabetes mellitus como factor de riesgo cardiovascular modificable


Se define diabetes como una enfermedad metabólica crónica, caracterizada por valores elevados de la concentración de glucosa en la sangre.




Esta se puede diagnosticar con algunas pruebas de laboratorio de rutina y según los siguientes valores:


Debemos saber que la diabetes puede estar presente sin manifestaciones clínicas, a lo que llamamos enfermedad asintomática, así que muchas personas pueden tener diabetes, incluso por años y no presentar ningún síntoma, sin embargo podemos encontrar manifestaciones clínicas de la diabetes que deben llamar nuestra atención  y son las llamadas cuatro “P”


Poliuria: orinar con mucha frecuencia

Polidipsia: sed exagerada que genera la necesidad de tomar mucho liquido

Polifagia: hambre exagerada, a tal punto que se comen cantidades mayores y muchas veces por día

Pérdida de peso

Sobre todo la relación entre los últimos dos síntomas, debido a que no debería ser frecuente tener una ingesta de alimentos aumentada y aun así, perder peso.


Generalmente esta relacionada con fallas metabólicas asociadas a la hormona producida en el páncreas que conocemos como insulina, puede que esta hormona se produzca en pocas cantidades, o como es mucho más frecuente, que no pueda ejercer adecuadamente su efecto, a esto último se le conoce como resistencia a la insulina y es el principal problema interconectado con la diabetes mellitus tipo 2 


Debido a que la principal función de la insulina es facilitar que la glucosa vaya desde la sangre hasta el interior de la celula, cualquier problema que haya en su función, genera que aumente la glucosa en la sangre, ocasionando lo que conocemos como hiperglicemia, que a la larga lleva a la diabetes como enfermedad.  


La resistencia a la insulina, característica de la diabetes mellitus tipo II, está íntimamente relacionada con el exceso de peso y la falta de actividad física, propia del actual sedentarismo de muchos hábitos urbanos.



Lo riesgosa para las enfermedades cardiovasculares, lo problemática y lo agresiva que puede llegar a ser la diabetes, además de lo manejable ante un buen control de los hábitos en el estilo de vida y fármacos (en caso de ser necesario), hacen que esta sea una enfermedad muy importante a la hora de considerarla como objetivo protagónico de prevención para riesgos de mortalidad tanto cardiovascular como metabólicos.

Dislipidemia como factor de riesgo cardiovascular modificable


Se llama dislipidemia a la alteración de las sustancias grasas en la sangre, principalmente los triglicéridos y el colesterol en sus diferentes formas, si bien, estas sustancias son necesarias en nuestro organismo para funciones como la producción de algunas hormonas, se tiene muy bien establecida la relación de enfermedades cardiovasculares con la elevación de sus valores en sangre.

Se asume que por cada 1 gr/dL que aumenta el colesterol total en sangre, aumentara el riesgo de enfermedades cardiavasculares en 1%

estas sustancias grasas pueden obtenerse por la ingestión de algunos alimentos como también por producción endogena en el hígado, de tal manera el aumento de colesterol puede deberse a incrementos en el consumo de alimentos ricos en colesterol o el aumento de la producción hepática.


El aumento de la actividad corporal es un importante factor para consumir colesterol por lo que una dieta adecuada y actividad física son útiles para su disminución.


Para saber si tiene cifras altas de colesterol, es necesario un examen de sangre, por lo general esta recomendado hacer el primer examen a los 20 años y luego repetirlo cada 5 años siempre que el resultado sea normal, en caso de que los valores sean elevados, un médico debe decidir la necesidad de un tratamiento y la frecuencia para controlar los valores.

Normalmente el aumento del colesterol en sangre, puede no provocar síntomas, aunque manifestaciones como el dolor de cabeza, el cansancio u otros síntomas, frecuentemente pueden ser ocasionados por alteraciones que son consecuencias de la elevación a largo plazo del colesterol como por ejemplo los problemas vasculares cerebrales. 



Por esta razón el adecuado y precoz control de las cifras de colesterol, es de gran utilidad en la prevención de enfermedades cardiovasculares y cerebrovasculares.



Los diferentes tipos de colesterol de especial importancia son el colesterol total, el colesterol HDL llamado colesterol bueno y el colesterol LDL o llamado colesterol malo.  




Los valores a tener en cuenta para estos tipos de colesterol y para los triglicéridos son los siguientes:


Hipertensión arterial como factor de riesgo cardiovascular modificable


La hipertensión arterial es el factor de riesgo modificable mas prevalente para las enfermedades coronarias, los problemas cerebrovasculares y la insuficiencia cardiaca.
Cada 20 mmHg que aumenta la presión arterial, genera un aumento del doble en el riesgo de enfermedades cardiovasculares


Se conoce como hipertensión arterial cuando la presión arterial se encuentra de forma crónica en valores iguales o mayores a 140 mmHg en la presión sistólica y  90 mmHg para la presión diastólica, Conllevando a problemas estructurales en las paredes de las arterias y problemas funcionales  principalmente en órganos como el corazón, el riñón o el cerebro.


Generalmente se necesita un mínimo de 3 registros en un lapso de una o dos semanas con la presión arterial por encima de lo normal para considerar que se está ante una hipertensión arterial.



La hipertensión arterial frecuentemente NO presenta síntomas pero puede, en ocasiones, manifestarse con dolor de cabeza, vómitos, mareos o cansancio, el hecho de que estos no se presenten, no significa que la hipertensión este ausente, la única forma de descartar o confirmar hipertensión arterial, es medir la presión arterial. 



Se debe tener en cuenta que la hipertensión arterial no se cura, pero si se puede tener con muy buen control. 
Para esto, el médico tratante será el encargado de decidir cuál es la mejor manera de tratar y/o controlar la presión arterial y si es necesario el uso de algún medicamento

También se debe tener en cuenta que la hipertensión arterial es un problema de larga data, por lo tanto en aquellos casos donde la presión arterial aumente ocasionalmente debido a un evento como por ejemplo el estrés de un mal momento, no puede ser considerado como hipertensión arterial, sino como una elevación transitoria de la presión arterial o como un evento hipertensivo.

Sin embargo en estos casos pueden presentarse manifestaciones clínicas y riesgo de llegar a generar problemas en otros órganos cuando la elevación de la presión arterial es significativamente alta, justificando la atención sanitaria en estos casos para monitorear y controlar la presión  evitando daños mayores.


Recuerde que la hipertensión arterial puede estar presente y NO ocasionar síntomas, por esto se hace útil el autocontrol de la presión arterial, la medición en la farmacia o la toma domiciliaria de la misma, actualmente existen equipos automáticos y semiautomáticos que son útiles y de fácil manejo, se debe consultar con el medico sobre las marcas homologadas debido a que algunos necesitan ser calibrados y otros no son recomendados o autorizados, como por ejemplo los que miden la presión arterial en el dedo o algunos que lo hacen en la muñeca.





No olvide registrar los números de su presión arterial en cada toma, apuntando además datos como la fecha, la hora, la posición en la que fue tomada y el tipo de equipo que fue utilizado, estos datos pueden ser de mucha utilidad para su médico a la hora de interpretar los resultados.


Tampoco olvide que este es el factor de riesgo modificable que más prevalece en las enfermedades del corazón, así que tener un adecuado control de presión arterial, disminuye increíblemente su riesgo a padecer enfermedades cardiovasculares.


Estrés y ansiedad como factores de riesgo cardiovascular modificables




El estrés se considera un factor psicológico, con una relación bastante importante en cuanto a las enfermedades cardiovasculares.

Bien sea estrés agudo por algún evento inesperado, o estrés crónico por una vida bastante inmersa, por ejemplo, en problemas relacionados con el trabajo diario, a lo que se le conoce como estrés laboral.

El estrés puede generalmente aumentar la presión arterial, alterar la frecuencia cardiaca, además de poder alterar el metabolismo de la glucosa y de los lípidos.




Se considera que el estrés, se da cuando no podemos cumplir adecuadamente con las demandas ambientales, bien sean sociales, económicas, laborales o demás.





¿Cuándo debemos pensar que estamos ante un cuadro de estrés?

  • Cuando se tenga un estado de ansiedad, que puede ser constante, transitorio o repentino

  • Cuando se sienta tensión de más en los músculos, particularmente en áreas como la nuca o la espalda

  • Se presenta con frecuencia la irritabilidad ante cualquier estimulo, incluso con razones, no bien justificadas

Obesidad como factor de riesgo cardiovascular modificable



Se considera que la obesidad es una enfermedad que por sí sola, aumenta el riesgo a padecer problemas de las arterias del corazón, predisponiendo a enfermedades cardiovasculares, pero también hay que considerar que la obesidad está muy relacionada con la hipertensión arterial, la dislipidemia, la ateroesclerosis y la diabetes mellitus, que aumentan mucho más el riesgo a padecer enfermedades del aparato cardiovascular.


La obesidad se presenta debido a una interacción entre factores genéticos predisponentes y factores ambientales, como los actuales hábitos de alimentación, que involucran poca ingesta de vegetales y frutas además de una elevada ingesta de alimentos procesados, elevadas cantidades de sal y grasas saturadas, esto sin incluir los nuevos hábitos que nos llevan al sedentarismo, causados por muchos de los avances tecnológicos que, entre otras cosas, nos llevan a pasar mucho tiempo en una silla y poco tiempo con adecuada actividad física, sin darnos cuenta de las repercusiones que se tienen sobre nuestra salud cardiovascular.

Como saber si tenemos obesidad y a su vez, que tanto puede estar afectando nuestra salud cardiovascular?
Para esto, usamos algo a lo que se le conoce como índice de masa corporal (IMC) y la medición de la circunferencia abdominal.

el IMC es la relación que se tiene entre el peso en kilogramos y la estatura de una persona, y se calcula, por supuesto, pesando y midiendo a la persona para luego relacionar ambos parámetros. Esto se hace mediante una formula que es:  

una vez obtenido el resultado, comparamos con algunos valores preestablecidos para saber si nuestro peso es ideal o se encuentra fuera de los limites normales, además de saber que tan asociado puede estar con el riesgo para la salud cardiovascular. Los valores son los siguientes:



Este valor si bien, es aceptado por muchas asociaciones de salud para diagnosticar y estimar riesgo de enfermedad cardiovascular, debemos tener en cuenta que se presenta la posibilidad de que algunos pacientes tengan el IMC elevado sin tener necesariamente problemas de obesidad o predisposición a problemas cardiovasculares. Estos casos son frecuente en algunos deportistas.

Otro punto muy importante a tener en cuenta, es que, no necesariamente debe estar elevado el IMC para tener predisposición o problemas cardiovasculares, se puede tener predisposición a problemas cardiovasculares aunque se cuente con un IMC normal o incluso por debajo de lo esperado.

Debido a que existen casos como los que acabamos de plantar, se hace necesaria la medición de otro parámetro que conocemos como circunferencia abdominal y determina la presencia o ausencia de obesidad abdominal



Esta adquiere particular importancia debido a que ,en su mayoría, aquellas personas que padecen de obesidad central tienen una estrecha relación y una muy alta probabilidad de padecer enfermedades cardiovasculares, incluso en aquellos casos donde el IMC está por debajo de valores que consideramos como anormales. 

También, en aquellas personas que tienen un IMC bastante alto, pero tienen una circunferencia abdominal dentro de lo que se considera normal, debemos pensar que su riesgo a padecer enfermedades cardiovasculares, no es tan elevada como lo expresaría solo la medición de su IMC.

Así pues, la circunferencia abdominal, es un indicador que se hace necesario tenerlo en cuenta cada vez que intentamos saber sobre nuestro estado y predisposición a problemas cardiovasculares.

Tabaquismo como factor de riesgo cardiovascular modificable





Se considera que el riesgo de enfermedad cardiovascular aumenta alrededor del doble en las personas que fuman con relación a aquellas que no fuman o que tiene un prolongado tiempo sin fumar, incluso el tabaquismo pasivo también esta asociado al aumento del riesgo a padecer enfermedad cardiovascular.




Realmente el riesgo cardiovascular aumenta con la cantidad de tabaco y los años de consumo, sin embargo aunque hay una clara relación entre la cantidad de tabaco fumado por día y el riesgo cardiovascular, sabemos que el riesgo aumenta considerablemente incluso con una baja exposición al humo de tabaco, como ocurre con la exposición al humo ajeno. De hecho, fumar solamente un cigarrillo al día conlleva la mitad del riesgo de cardiopatía coronaria y accidente vascular cerebral (AVC) que fumar 20 cigarrillos al día. Por esto podemos decir que NO hay una cantidad segura de cigarrillos que no afecte nuestra salud, así que fumar poco no nos protege de los daños que genera el cigarrillo.

Este mal hábito no afecta solo la salud cardovascular, también tiene importantes repercusiones en otros órganos como los pulmones, el aparto gastrointestinal, aumenta el riesgo de fracturas oseas, enfermedades en las encías y cavidad oral y por supuesto no podemos olvidar su estrecha relación con la aparición de cáncer, además se estima que de todos los fumadores, mas de la mitad morirá por una causa asociada al tabaquismo y todos presentan disminución de su calidad de vida.

En embarazadas,  se debe recordar que el cigarrillo atraviesa la barrera placentaria, llegando así al bebe y ocasionándole problemas, como por ejemplo, aumento en la posibilidad de padecer enfermedades como:


bronquiolitis, asma, neumonía o algunos otros problemas respiratorios, además de que se tiene una muy bien establecida relación de muertes súbitas en los recién nacidos con madres fumadoras


Un error bastante común es pensar que por tener mucho tiempo fumando o haber fumado una cantidad muy grande de cigarrillos, no tiene sentido dejar el hábito, pensar esto es un ERROR.



REALMENTE EL MEJOR MOMENTO PARA DEJAR DE FUMAR ES AHORA MISMO!

Los beneficios de dejar el mal hábito del cigarillo también se empezaran a notar muy rápido.






Así que recuerda, el tabaquismo es significativamente dañino en muchos aspectos, el mejor momento para dejar el hábito de fumar es ahora mismo y los beneficios los notaras desde muy temprano una vez abandonado el habito. 
Déjalo  YA!

Sedentarismo como factor de riesgo cardiovascular modificable





La organización mundial de la salud (OMS) considera que la inactividad física o 
sedentarismo es una de las principales causas de enfermedades cardiovasculares y afirma que forma parte de este grupo, alrededor, del 60% de la población mundial.


Se establece que el sedentarismo tiene una relación directa con la morbilidad y mortalidad de origen cardiovascular, debido a que predispone enormemente a padecer de ateroesclerosis e hipertensión arterial


Según la OMS una persona se considera físicamente inactiva o sedentaria, cuando no realiza un mínimo de 150 minutos de actividad física regular durante la semana







El empeoramiento de los hábitos de vida que se están presentando actualmente en la sociedad, los cambios en la tecnología laboral, las frecuentes fuentes actuales de ocio y algunas otras nuevas costumbres relacionadas, contribuyen a que, tanto los adultos como los niños, frecuenten conductas evidentemente sedentarias y perjudiciales para la salud cardiovascular  


La inactividad física, además de ser por sí misma un factor de riesgo bastante importante, también ha demostrado tener estrecha relación e influencia sobre otros factores de riesgo como la obesidad, la hipertensión arterial o las alteraciones de los lípidos, así como el empeoramiento de estas, debido a que una persona con poca actividad física, generalmente presenta tendencia a una mala alimentación y aumento de peso significativamente riesgoso


De igual manera que muchos otros factores de riesgo, el sedentarismo es un factor de riesgo modificable, que cuando se logra corregir de forma correcta, presenta beneficios significativamente altos a la salud cardiovascular.

Antecedentes familiares como factor de riesgo cardiovascular no modificable




Las enfermedades cardiovasculares que se dan en forma precoz (antes de los 55 años) en familiares de primer grado como los padres o los hermanos, están generalmente asociados con aumento del 50% del riesgo para padecer enfermedades cardiovasculares. 



Es probable que esta asociación sea acorde con la relación genética que tienen las enfermedades cardiovasculares o algunos factores de riesgo como la predisposición genética a hipertensión arterial o diabetes mellitus


Género como factor de riesgo cardiovascular no modificable




Antes de los 60 años, el riesgo de enfermedad cardiovascular coronaria y cerebrovascular es 2 veces mayor en varones que en mujeres, aunque una vez alcanzado los 60 años el riesgo aumenta más rápido en las mujeres, siendo a los 80 años igual para ambos géneros.


Se considera que estas diferencias en el riesgo están influidas por las características hormonales protectoras que se presentan normalmente en las mujeres premenopausicas y que se pierden una vez alcanzada la menopausia en avanzadas edades.



Por esto, se considera que el género tiene influencia sobre el riesgo cardiovascular ya que en las mujeres hay menor riesgo en algunas etapas de la vida y luego tienden a presentar un aumento considerable del riesgo cardiovascular y cerebrovascular.