De la misma forma que disminuyen nuestras aptitudes a medida que avanza nuestra edad, también hay cierta disminución en la eficacia del corazón ademas de cambios en las arterias, que nos pueden llevar a padecer problemas cardiovasculares, esto se da por los llamados cambios fisiológicos, que son el resultado propio del envejecimiento, sin embargo estos cambios pueden estar influidos por los diferentes estilos de vida de una persona, acelerando o enlenteciendo su aparición y así mismo mejorando o empeorando el pronóstico luego de aparecer.
Algunos de estos cambios son el aumento de la rigidez de las arterias, que nos hacen padecer de presión arterial elevada HTA y nos predispone a enfermedades cardiovasculares y vasculares cerebrales, además los cambios propios de la disminución en la actividad del corazón, que aumenta las posibilidades de presentar insuficiencia cardíaca, estas posibilidades se duplican por cada década después de los 50 años en hombres y 55 años en las mujeres.
